NO TODO ES LO QUE PARECE

Rostro de Roca

Algunos encuentros en la vida nos parecen tan reales y nos debatimos entre  verdad y  fantasía.
Me gusta la fotografía y cada vez que viajo llevo  mi inseparable amiga, una cámara Olympus con la cual  inmortalizo diversos momentos de mi vida.
Fotografiar los instantes que no quiero olvidar, como captar con el lente de mi cámara aquello que mis ojos ven más allá de mi mente fantasiosa o imaginación y deseo conservar.
Esta fotografía me retó y en lo más profundo de mi corazón. Guardé esta sonrisa del "Rostro de  Roca". Hace un año y medio atrás,  visité la Isla española de Tenerife, me sorprendió el viaje con muchas experiencias que rozaban lo místico. Hice cosas por vez primera. Como nadar con las ballenas jorobadas. Salté desde el barco pirata Peter Pan y me sumergí en el mar.Allí las vi  un poco distanciadas. Recuerdo que el Capitán del barco aconsejaba que no me apartara del barco y le obedecí. Fue una experiencia increíble e inolvidable. Siempre he sido arrojada. Para el amor también, pero esta es otra historia. 
Existe ese mundo  que el ojo físico del humano no capta. Porque todo lo que va más allá de la mente que lo analiza todo, escapa a la comprensión del hombre desconectado.
La naturaleza es bella, maravillosa, sorprendente, viva en cada parte de ella. Su vida la observé en la arena que pisé, en las caracolas que las olas me regalaron. Compartieron sus secretos conmigo en forma de murmullos cuando me las ponía en mis oídos para oír el sonido del agua. Eran momentos de intimidad entre la Madre Naturaleza y yo.  
En los mares donde nadé los delfines y ballenas jorobadas me observaron a distancia y siempre cuidaron de mi. De algún modo lo sentí así. Intuitivamente.  Desde niña viví cerca de los animales y aun lo hago. Cada uno de ellos son verdaderos Maestros que me han enseñado tanto. Hoy convivo con un par de conejitos de raza angora son la señora Pepi y don Rudolfito. Encantadores, inteligentes, tiernos y fieles a su pareja. 

Hay lugares en nuestro planeta de inmensa belleza que no se puede describir porque ofendería lo divino que encontré allí.
La sonrisa del "Rostro de  Roca" ha sido una de las experiencias místicas que no olvido y eso que he tenido varias. Ya ni las cuento   Todo en mi vida ha sido como místico. 
He visto la sonrisa de los hombres. Pueden sonreír mostrándo sus dientes blancos o no tan blancos. Luego  descubres que es una sonrisa fingida ya que oculta una verdadera intención. A veces no guarda ninguna relación la sonrisa y el resto del cuerpo. Es un lenguaje corporal discordante y del cual se puede aprender muchísimo siempre que seas un buen observador. 
Esta sonrisa del Rostro de  Roca en la Isla de Tenerife, nunca lo había descubierto en ningún lugar en los diversos sitios preciosos que he visitado viajando.
Esta sonrisa parece la sonrisa de mi abuelo. Solo que esta Roca no es mi abuelo Arturo.  Pero me lo recuerda.El tenía un Espíritu como una roca. Fuerte. 
Cuando me paré delante de esta roca inmensa adornada por la playa de la isla y las olas esculpiendo sus lados con cada golpes, también me recordó los golpes que la vida me había dado. Tenían fuerzas los golpes. Recorrí con mis ojos cada recoveco del Rostro de la Roca...y descubrí la ternura de sus arrugas. Eran las mismas arrugas en el rostro de mi abuelo Arturo. Moreno y de dientes blancos como la nieve. Sus ojos sonreían siempre que me sonreía en silencio. No era un hombre que hablara. Más bien le gustaba observar lo que pasaba alrededor y amaba la lectura y a mi.
Tantos recuerdos vinieron a mi memoria al encontrar este rostro esculpido en la roca gris de Tenerife. Me sobrecogió y mi lente la 
escondió de un disparo dentro de la máquina fotográfica.
¿Puede algo tan simple como esta Sonrisa impactarme tanto? Pues sí. Me sucedió. La explicación que doy a este tipo de experiencias es que al vivir inmensamente conectada con mi Planeta y respetuosa de sus hijos, veo con los ojos de mi Corazón, del Alma, de mi Espíritu y los físicos incluidos  todo la maravillosa Creación dispuesta ante mis ojos para disfrutarla y amarla. Cuidarla y respetarla. 
Puede que esta sonrisa a ti no te diga nada. Da igual. Es mi experiencia y solo la quiero compartir.
En nuestra naturaleza humana, hemos olvidado sonreír de verdad. "Una sonrisa vale más que mil palabras", alguien dijo o escribió. Sonreir desde el Corazón y cuando lo haces, a veces, se malinterpreta. Es otra cuestión de cultura, de prejuicios y otras cosas más. En realidad cuando sonrió lo hago para mi. Es mi reflejo de que mi mundo interior y yo, estamos en Paz y conectados con todo el Universo que nos rodea. 
¿Parece o no parece? La pregunta está de más! Ya que a mi me ha sido útil para reflexionar acerca de la verdad y la mentira. La fantasía de lo que es real y de aquello que no es. Una sonrisa sincera que transmite un sentimiento de una que oculta los verdaderos. Cuando observo en mi presente los acontecimientos, descubro un mundo que siempre estuvo ahí y que no tengo nada que temer ni que esperar. Todo de todos modos ha de pasar, pasó y está pasando...
No todo es lo que parece sobre todo en el amor. Este es el territorio donde mas se sonríe cada vez que quieres obtener algo del otro. El juego de la conquista utiliza mucho esta arma. Pero este tema lo dejaré para mas adelante. 
Tengo mucho que escribir acerca de esto. Más bien mi corazón tiene mucho que decir, pues es el quien ha estado en la Arena,  para defender su portal, su luz, su existencia...y no ha pasado mucho tiempo desde la última vez! Son menos de dos años. 
Intento no olvidar que "no todo es lo que parece". La próxima vez seré mas cuidadosa por el bien de mi corazón!