Desde que tengo memoria, mis navidades significan mucho para mi, una Navidad es tan hermosa. Sentir ese espíritu a mi alrededor. No concibo una Navidad sin Amor. Para mi lo más importante es que las personas esten unidas con lazos de amor de verdad. No importa si estan lejos o cerca pero que no falte esa expresión de Amor en cualquier forma.
Cada persona tiene una idea de como debe celebrar su navidad. En este instante en que escribo estas líneas evoco personas, paisajes, fechas, lugares lejanos, de momentos felices cuando eramos todos unidos y nuestros corazones abrigaban el calor de lo que significa amar desde el corazón, con sencillez, sin lujos ni aparentar cosas que no somos.
Siempre creí en la existencia de Papá Noel allá en el Polo Norte me decían mis mayores que vivía y jamás dejé de soñar que lo conocería algún día. Para mi los papá noeles me visitaron cada año y en cierto modo, saltaron la ventana de mi habitacion muchas veces. Cuando era pequeña, me solía levantar a escondidas para mirar bajo el arbol para ver donde se escondían mis regalos. Apretaba cada paquete con mis dedos pequeños y flacuchentos dejando las marcas en los paquetes de mi curiosidad temprana. Era una niña muy feliz curioseando agasapada.
El tiempo ha pasado y hoy mi niña busca otro tipo de regalos, aquellos que no se compran con dinero. Aquellos que se dan, simplemente porque nace.
En mi época de vacas flacas, solía confeccionarles a mis hijas sus regalos con mis propias manos. Como una artesano creaba vestidos, bufandas, tejía, bordaba, hacia queques, pintaba tarjetas y dibujaba millones de sonrisas en ellas porque me gustaba observar sus caritas sonriendome cuando descubrian sus presentes bajo nuestro abeto de pie en el suelo. Muchas veces nuestro arbol era robado por otros para traernoslo, ya que mi situación económica me impedia comprarlo yo misma. Esos fueron tiempos duros en Finlandia. Nosotras, mis hijas y yo, vivíamos con mucha alegria bajo los 20 grados y la oscuridad finlandesa de los inviernos largos, casi eternos. Pero nunca nos faltó la alegría. Quizás era yo quien las contagiaba. Era una madre llena de creatividad y siempre me las ingeniaba para que la mesa estuviera llena de manjares y cosas ricas de navidades. Evité todo el tiempo que ninguna de nosotras sintiera la ausencia de los seres queridos lejanos. Solo de un par de ellos recibiamos postales de navidades. Para nosotras era tan importante pero nunca se acordaron de nosotras que existiámos. La memoria es tan frágil. Por todas estas experiencias, hemos aprendido a dar mucho más de lo que recibimos y nos encanta hacer regalos simples, sencillos. Nunca hemos dado algun presente sintiéndonos avergonzadas por lo pequeño del regalo. Al contrario hemos sido muy agradecidas por que alguien se acordara de nosotras. Hemos sido muy afortunadas de tener a una abuela finlandesa, una familia finlandesa que nos adopto en cierto modo y cada vez que ocurría algun acontecimiento en nuestras vidas, nos rodeaban sus brazos extraños no conssaguíneos pero nos llegaban con tanto amor esos abrazos que hoy permanecen esos lazos de amor entre España y Finlandia. Jamás podríamos olvidar escribir una tarjeta a nuestros amigos y vecinos que tanto han hecho por nosotras.
Ser extranjeros aqui no es lo mismo que sentirse extranjera en la propia tierra natal. Desde luego es muy diferente. Y lo es más ser una extraña para la familia que nos entierra antes de morirnos. Somos las desarraigadas, como los eslabones perdidos de una cadena. Solo que esta cadena se oxidó en el tiempo por la falta de amor de quienes nunca han vivido las experiencias del dolor lejos de una tierra querida y amada. Hace falta mucho valor y coraje para soportar estar lejos de la familia donde se vino a nacer. A pesar de ello nosotras hemos mejor que vivido muchas navidades blancas y luminosas. Cuando en el Polo Norte llega navidad todos nos alegramos porque todo el mundo la espera con alegría. Son estos momentos los que me llenan el alma de calor cuando aqui hace frio y los corazones de la gente de aquí permanecen cerrados debido a los problemas personales.
Hace unos dias atrás pasé una tarde en compañía de nuevas y simples personas. Cada una llevaba su propia mochila llena de experiencias relacionadas con el dolor. Asi y todo, mientras escuchaba sus historias de vida yo recordaba las propias. Di un recorrido mental rápido de las cosas que viví en Finlandia, España y en mi propia tierra . Comprendí lo importante que es avanzar y no quedarse estancada en la misería que causa el dolor cuando algo no nos resulta como deseamos. La vida ofrece muchas nuevas oportunidades y personalmente, el hecho de estar cerca la navidad me está recordando las cosas que en el pasado hice para avanzar y sacar a delante a mi misma y a las hijas. Casi ni tenía los recursos y experiencias que poseo hoy. La navidad pasada trajo sus lecciones y aprendí cosas nuevas de mi y de los demás. Compartí amor generoso con quien decía amarme. Imagino que esta navidad me traerá alguna otra experiencia enriquecedora nuevamente y espero tener la capacidad de atesorar esos momentos que están esperándome
alli en el Polo Norte con las personas que aun me quieren y recuerdan y que no han dejado nunca de hacermelo saber de diversas formas. Por ejemplo, mi querida amiga Tuula, quien desde Benalmadena, nada mas aterrizar su avión en España, me llama y me expresa su alegría por estar un poquito mas cerca de mi como dijo en el telefono el dia que me llamó. Estas son las cosas que aprecio. Son las acciones las que nos hablan de quien realmente somos y de lo que significamos para otros.
Navidad es un excelente tiempo para recordar con amor a los que se han ido al mundo espiritual como también lo es para expresar todo nuestro amor a los amigos verdaderos, a una hermana, a una tia, a unas amigas lejanas pero cercanas en el corazón, y al amor de nuestra vida. Por ser quien soy, siempre perdono y desearé desde lo más profundo de mi corazón una muy Feliz Navidad a todo el mundo!
Estoy rezando para que haya paz y amor en todo el mundo y paz en los corazones de quienes sufren la distancia, la separación, la enfermedad, el dolor, el olvido es una enfermedad del Alma, por favor no me olvides, yo no te olvido ningún instante! Mantengamos la Fe y la Esperanza en que todo es posible...!
!FELIZ NAVIDAD de parte de Liisa !
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